por Babymoov

Introducción de especias dulces, hierbas y plantas aromáticas en la alimentación del bebé

La diversificación alimentaria es objeto de muchas inquietudes y precauciones. Sin duda alguna, es importante seguir el desarrollo del organismo del bebé e introducir nuevos alimentos solo en función de sus necesidades nutricionales y de sus capacidades digestivas.

Las especias, las hierbas y las plantas aromáticas merecen la atención de las jóvenes mamás pues, además de las propiedades beneficiosas que aportan, sus sabores y colores contribuirán a convertir las comidas en un momento de placer.

¿Cómo elegirlas?

Para el bebé, es conveniente que elija especias no picantes como la cúrcuma, el anís, la canela y la vainilla. La albahaca, el perejil, el eneldo o el perifollo combinan muy bien con los purés de verduras. Mientras que las plantas aromáticas como el tomillo, el romero o el laurel aportan un sabor especial a los adobos y los platos cocidos a fuego lento.

La cebolla, el ajo y el chalote pueden introducirse cocidos alrededor del octavo mes, pues sus virtudes gustativas no deben olvidarse en la cocina casera.

¿Cuándo introducirlas?

Poco a poco, la introducción de una fina hierba o de una pizca de especia mejorará la receta y su sabor a partir de los 6 meses.

De cualquier forma, es importante que el niño deguste primero el sabor puro de los alimentos introducidos, uno a uno, para que tenga sus puntos de referencia.

Las virtudes

Además de los sabores que aportan a la cocina a fuego lento a partir de 1 año, la mayoría de las plantas aromáticas, como el tomillo, el romero o el laurel, poseen propiedades desinfectantes. Ésta es la razón por la que los antiguos añadían una hoja de laurel a la sopa de verduras.

A partir de los cinco o seis meses, según el ritmo de diversificación, la introducción de finas hierbas como la albahaca, el perejil, el eneldo y el perifollo aportarán frescor, sabor y tonicidad a los purés de verduras.

Alrededor del décimo mes, la vainilla y la canela pueden ser ideales para aromatizar ligeramente los postres. Son especias conocidas por sus propiedades tónicas y digestivas.

Recetas con especias

Con la introducción de la carne a partir del 7º mes, el pollo puede adobarse con unas gotas de limón y hojas de albahaca; el cordero con romero o una pizca de mezcla de especias.

El tomillo o la menta combinan bien con el calabacín, la berenjena y el tomate Cocer los alimentos con las hojas y retirarlos antes de triturarlos, potencia el sabor.

A las compotas de ciruelas, añada una pizca de canela en polvo o un trocito de canela en rama; a las de manzana o de pera, añada  2 cm de vaina de vainilla o una pizca de azúcar a la vainilla natural.

A partir de los 8 meses, pique una ramita de cebolleta o unas hojas de perifollo para espolvorear los purés del bebé.

Recuerde

Las especias fuertes y picantes no deben utilizarse bajo ningún concepto. Las especias dulces, las plantas aromáticas y las finas hierbas aportan dulzor, color y propiedades beneficiosas a los platos del bebé.